Gracias a Periodista Digital he podido leer la última editorial de ABC, titulada "La monarquía y sus enemigos". En ella, el diario critica a todos aquellos que durante estos días han cuestionado la relevancia de la figura monárquica, y los critica con un texto como éste:

Algunos se permiten poner notas a Don Juan Carlos, como si fuera un joven alumno, en nombre de la intolerable soberbia de quien se atribuye la facultad de decidir sobre el bien y el mal.

Así que nada, a partir de ahora, cada vez que quiera criticar a alguna personalidad pública llamaré a ABC para preguntar si tengo un rango suficiente para hacerlo o tendré que seguir medrando. Por otro lado, se ve que todo este tiempo estuve equivocado, y lo que para mí era ejercer mi derecho a la libre opinión en realidad parece que es la intolerable soberbia de quien se atribuye la facultad de decidir sobre el bien y el mal.

Iba a escribir unas pequeñas líneas con mi opinión sobre todas las críticas que últimamente están recibiendo tanto el Rey como sus detractores, pero acabo de leer esta columnita de Nacho Escolar y no veo necesario decir mucho más.

Desde mi opinión, de esta columna cabe resaltar frases como que el plan de la Iglesia "es obvio y el Rey es lo de menos: quieren incendiar España para culpar después al bombero, a Zapatero. Antes rota que roja" o "En este país hemos pasado del Tabú Primero de España a plantear debate nacional sobre el peso de la princesa. Y hay que adaptarse, como en Inglaterra. Nada perjudica más a la Corona que la sobreprotección de una ley que, si de verdad dice que quemar una foto es un delito, habría que cambiarla".

De todos modos, como el adoctrinamiento está de más, os recomiendo que la leáis entera y saquéis cada uno vuestras propias conclusiones.

P.D.: como detalle curioso, llama la atención que en ABC se refieran a Federico Jiménez Losantos (también llamado Jiménez Losantos o Losantos directamente) como Jiménez. El plumero del desprecio se ve por todos lados y recuerda a cuando el presidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, se refiere al del Sevilla (José María del Nido Benavente) como "el señor Benavente".