María Dolores te quiere gobernar

Esta mañana supimos que María Dolores de Cospedal, Congreso mediante, será la nueva secretaria general del Partido Popular, algo que no debería sorprender demasiado, ya que desde el principio estaba en las quinielas. Además, los que la conocen bien podían esperarse algo así, y en Castilla-La Mancha la conocemos muy bien.

María Dolores de Cospedal llegó a Castilla-La Mancha en 2006, cuando más desesperado estaba el PP en esta región, ya que ni tirando de Adolfo Suárez Illana había conseguido apenas reducir la insultante mayoría del PSOE de José Bono en las cortes regionales. Tras la desaparición de Suárez Illana llegó De Cospedal desde Madrid sin que nadie tuviese demasiada confianza en sus posibilidades ante unas elecciones regionales en las que José Bono, ya fuera del PSOE de la región, dejó como candidato a José María Barreda, su anterior vicepresidente. Sin embargo, algo hizo la candidata a la presidencia de Castilla-La Mancha que, poco a poco, fue ganándose a la gente que comenzaba a estar harta del panorama predominante; además, José María Barreda, que no tenía, ni de lejos, el aparente carisma que tenía Bono, se dedicaba a vivir de las rentas y de la herencia de mayoría absoluta que le había dejado su predecesor. Así pues, combinados estos dos factores, los resultados no tardaron en llegar: en las elecciones autonómicas de 2007, María Dolores de Cospedal rebañó a Barreda 60.000 votos y 3 escaños y se convirtió en la primera 'popular' que conseguía quitar votos al PSOE de C-LM en muchos años.

A raíz de llegar a la región, De Cospedal siempre dijo que su futuro estaba aquí y no en Madrid. Sin embargo, tras las elecciones de 2007, en las que el armamento nacional del PP supo que alguien de sus filas empezaba a ganar terreno en Castilla-La Mancha, la candidata empezó a recibir apoyos y a cultivar una ambigüedad política y un carisma que le hizo acudir a todas las mesas: y no sólo compartió mesa con Federico Jiménez Losantos, sino que también estuvo nada menos que en el plató de Iñaki Gabilondo comentando la noche electoral del 9-M. Además, comenzó a ser entrevistada cada dos por tres por todos los periódicos de tirada nacional: ABC, Periodista Digital (1 y 2), Público...

Con estas constantes apariciones en todos los medios, De Cospedal no sólo iba refrescando al PP de Castilla-La Mancha frente a un Barreda cada vez más caduco, sino que además se iba haciendo un huequecito cada vez más seguro en el panorama político nacional. Hace poco se comentaba que, al haber manifestado su apoyo a Rajoy (aunque sin soltarle la mano a Esperanza Aguirre), había cometido un grave error que podía alejarla de la primera línea del partido; sin embargo, la no existencia de otras listas ha acabado poniéndose de su lado y la ha dejado en una posición más que ventajosa.

Y en Castilla-La Mancha la gente se hace otra pregunta: ¿cuál será el futuro de De Cospedal en la región? Pues bien, parecía estar claro que las elecciones de 2011 están demasiado cerca como para ganarlas, pero sí es cierto que seguramente seguiría rapiñando votos a Barreda y dejaría al PSOE en una situación muy pero que muy frágil de entonces en adelante. Ahora, al analizar el futuro de De Cospedal en Castilla-La Mancha, nos encontramos ante un arma de doble filo: por un lado, hace apenas unos días que se publicó una encuesta que la dejaba en una pésima posición frente a Barreda, lo que podría acelerar su despedida de la región para centrarse en el PP nacional. Sin embargo, este nuevo cargo de secretaria general del partido podría darle un grandísimo empujón para afrontar con ciertas garantías las elecciones autonómicas de 2011, y seguro que en el PP quieren aprovechar eso. El tiempo nos va a mostrar qué es lo que finalmente hará una de las personas, sin duda, más inteligentes que ha dado el PP nacional en los últimos años.

María Dolores te quiere gobernar... y veremos si al final no lo consigue.

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