A lo largo de estos dos días, en Miciudadreal.es os hemos ofrecido un reportaje doble sobre la adjudicación de contratos y subvenciones por parte de las instituciones públicas a según qué colectivos. Unas adjudicaciones y un reparto de dinero totalmente arbitrarios y faltos de ningún tipo de criterio público que en ocasiones acaban estableciendo ciertas relaciones de favor o de clientelismo entre la institución pública y el colectivo privado.

El reportaje está dividido en dos partes:

- (I) La publicidad institucional en los medios de comunicación. Repasamos los (inexistentes) criterios según los cuales las instituciones públicas invierten millones de euros en publicitarse en los medios de comunicación, una práctica que en la mayor parte de los casos sirven para subvencionar y financiar de forma encubierta a los medios. Sobra decir que este arbitrario reparto de cantidades de dinero tan elevadas suele servir también para dirigir y controlar lo que el medio publica o deja de publicar.

- (II) Cuando los políticos pretenden ser juez y parte. En esta segunda parte analizamos la implicación de algunos políticos en la concesión de según qué subvenciones a según qué colectivos. Traemos ejemplos concretos de colectivos concretos tradicionalmente protegidos y bien tratados por una institución concreta: el Ayuntamiento de Ciudad Real.