Fácil: hazle una pregunta a Hugo Chávez:



Si este rodeo y estos ridículos malabares dialécticos de Hugo Chávez nos parecen criticables, hemos de estar de enhorabuena, ya que en España esto no pasa. No pasa porque en España los políticos ni siquiera aceptan preguntas en sus ruedas de prensa. Como mucho, podemos optar a que un político se autopregunte y autorresponda.